Megumi Ishitani, quien es la directora de varios episodios de One Piece, explotó en redes, más específicamente en su cuenta oficial de Twitter/X @ishigyunyu al ver imágenes generadas por IA que imitaban el estilo de Studio Ghibli. Su reacción fue clara y sin filtros: «Han manchado a Ghibli. No los perdonaré». Al parecer la inteligencia artificial sigue abriéndose camino en la industria creativa, pero no siempre de la mejor manera.
Directora de One Piece molesta «Han manchado a Ghibli. No los perdonaré»
Al parecer hace poco se viralizaron imágenes generadas con IA que tomaban escenas, personajes y paisajes de One Piece y los reinterpretaban con una estética que claramente evocaba a Ghibli. Colores suaves, fondos llenos de detalle y ese aire nostálgico tan característico del estudio de Hayao Miyazaki. Para muchos usuarios fue solo un ejercicio creativo o una curiosidad estética. Para Ishitani, fue una falta de respeto.
Y no solo por una cuestión de gustos. La directora de One Piece fue más allá y señaló que estas prácticas podrían estar violando derechos de autor. Según ella, copiar un estilo artístico tan reconocible sin permiso, y encima hacerlo con una herramienta automatizada, no es solo feo, sino potencialmente ilegal. Incluso pidió que se tomen acciones legales para frenar este tipo de contenidos. «No puedo tolerar que Ghibli sea tratado de forma tan superficial», escribió.
Lo más grave es que, luego de su queja, algunos usuarios decidieron «responderle» generando imágenes de ella misma hechas con IA. El resultado fue lo que todos esperábamos, imágenes perturbadoras, poco realistas y hechas claramente con mala intención. Ella describió la experiencia como «realmente horrible», y no cuesta imaginar por qué.
Este incidente pone sobre la mesa varios temas que no son nuevos, pero que siguen sin resolverse del todo, ¿dónde está el límite entre inspiración y copia? ¿Qué pasa cuando una máquina se alimenta del trabajo de cientos de artistas humanos para crear algo nuevo? ¿Y qué hacemos cuando esa creación ofende, deforma o se aprovecha del estilo de alguien más?
La comunidad del anime, en general, se ha mostrado bastante empática con la directora de One Piece. Muchos fans y colegas han salido a respaldarla, recordando que tanto el trabajo de los directores como el de los estudios como Ghibli es artesanal, meticuloso y profundamente humano. La animación tradicional japonesa no solo es dibujo; es emoción, ritmo, sensibilidad cultural. Y que venga una IA a tratar de imitarlo en segundos, puede sentirse, como mínimo, invasivo.
Por otro lado, también hay quienes defienden estas herramientas como medios de expresión. Algunos usuarios aseguran que no buscan reemplazar a nadie, sino explorar posibilidades estéticas nuevas. Pero incluso en ese contexto, el respeto debería estar primero. Si estás usando el estilo de alguien tan icónico como Ghibli, es inevitable que entres en terreno delicado.
Además, esto no es un caso aislado. Lo hemos visto con música, ilustraciones y doblaje, eso solo por mencionar algunos. La IA está rompiendo barreras técnicas, pero también está desdibujando los límites del consentimiento y la autoría. Que la tecnología lo permita no significa que esté bien. Y ahí es donde artistas como la directora de One Piece están poniendo el freno.
Por ahora, no hay leyes claras que regulen este tipo de creaciones con IA. Pero lo que sí hay es una conversación que cada vez se hace más urgente. ¿Cómo protegemos la creatividad humana en un mundo donde las máquinas pueden imitarla al instante?
En medio de todo esto, lo que queda claro es que el trabajo de gente como la directora de One Piece, Ishitani y estudios como Ghibli merece ser cuidado, no explotado. Y si algo nos enseñó Ghibli es que lo importante no es solo lo que se ve bonito, sino lo que se siente real. Y eso, al menos por ahora, la IA no lo puede copiar.